Es la nueva terapia que te puede servir (me) para desahogarte (me) a gusto de las arbitrariedades de esta vida. Consiste en que maza en mano derribas habitaciones impolutas, entre saltos y saltos en la cama, te cargas la televisión, los muebles, los cuadros; entre pintarrajeos en las paredes, la emprendes contra toda una estantería de libros y discos ordenados, y ya el placer más absoluto, la porcelana y la cristalería que choca contra el suelo al estilo de algunos restaurantes griegos mientras bailas el sirtaki.
Esto del deroombing es de lo más in en Madrid, descargas la ira contenida sin tener que asumir culpa alguna porque de todo lo que has roto nada es tuyo.
Pues es eso, en una impostura y acto de rebeldía me quito el quimono y mi ira queda manifestada.
5 comentarios:
Nunca había oído hablar de tal práctica. Me sorprende, ya que por estos días pensaba en tirar alguanas de las paredes de mi casa para cambiar la distribución.
Acepto colaboradores, ya me estoy poniendo lo guantes !!
Geisha...no nos creemos tu forma de manifestar tu ira. Los lectores masculinos de tu blog te pedimos testimonio fotográfico del momento. No es por nada personal... entiendenos.
Vale, vale, vale..... no quería decir nada de nada. Mi ira es por que alguien que quiero mucho ha hecho un viaje muy largoooooooooo.
Querida Fiamma, es una terapia estupenda antiestresante. Y ya que aceptas colaboraciones, me apunto a la reforma de tu casa. Ya me estoy llevando música atronadora para que no se oigan los golpetazos.
Jajaja querido Samurai, ¿quieres foto del momento?. Ya sé que la filosofía oriental es más de paciencia, meditación, pranayamas y cantos de pájaros.
Estos pequeños pecados no son muy glamurosos... pero y lo bien que te quedas después.
Publicar un comentario