Es conocido que la actriz sueca aceptaba muchas invitaciones pero luego no iba a ninguna diciendo: “Nadie echa nunca de menos a nadie”.
Yo si hago una fiesta y la invito, y no viene, la echaría tanto de menos que yo no estaría ni en mi propia fiesta de la desolación.
1 comentario:
Es absolutamente comprensible. Lo mismo me ocurriría a mí si usted no se viniese en mi fiesta para dos.
El Jardinero
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