El antropólogo y comunicólogo Gregory Bateson, comprobó que toda comunicación contiene siempre dos tipos de afirmaciones. Una en el plano objetivo (sí te digo sí, es SI); y otra en el plano relacional (te estoy diciendo sí, pero en realidad es NO)
Por ejemplo: Imaginemos que tu novia compra la casa donde vais a vivir. Si te gusta, dices SI, y saltas de contento. Pero si la encuentras horrible, dices un simple “Sí, me gusta”... y no saltas porque estás horrorizado.
Dices que SÍ por no ofender y te aguantas con la casa en la que vas a vivir el resto de tu vida.
2 comentarios:
Te adoro pero no se lo digas a nadie
Mira gato, si supieras quién eres. No dudes que se lo diría a todo el mundo... pocas veces adoran a una
Publicar un comentario