A quién se le ocurre ser sede de una versión homoerótica de la última cena de Cristo, pues nada menos que al museo católico diocesano de Viena, algo así como una de las principales instalaciones de la principal catedral del país.
Así, ha resultado que la obra más polémica del artista austriaco Hrdlicka, titulada “La última cena de Leonardo”, donde aparecen los apóstoles borrachillos en plena orgía homosexual encima de la santa mesa, ha sido retirada de la exposición “Religión, carne y poder”.
En total se trata de unas 50 pinturas, dibujos y esculturas con carga erótico-sexual que ha vuelto abrir el debate de si es arte o blasfemia. El pobre artista que creó la obra en el 84 la realizó en homenaje al cineasta Pier Paolo Pasolini.
El caso es que el simpático arzobispo vienés, dice que la obra no se ha censurado sino que se ha retirado por respeto a lo sagrado.
El artista que es manifiestamente ateo ha justificado su obra diciendo que como no había mujeres, Jesús y sus apóstoles debían aplacar su ardor sexual por otros medios ya que Leonardo Da Vinci tenía la opinión de que el círculo apostólico se mantenía unido gracias a la erótica homosexual.
Quién le dijo a este hombre que no había mujeres, en fin, les dejo la cena:
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